ARTHUR RIMBAUD: HUIDA HACIA NINGUNA PARTE

 

    Arthur Rimbaud nació en 1954 en Charleville, al norte de Francia. Siendo niño, su padre, un militar de prestigio al que apenas había conocido, abandonó la casa familiar, por lo que el futuro poeta se crio junto a su madre y sus hermanos en un ambiente provinciano y encorsetado. Pronto destacó en la escuela por su precocidad y sus grandes dotes literarias, de modo que a los quince años ya ganaba todos los premios escolares y en 1870 vio aparecer publicados sus primeros versos en una revista local. Animado por ello, Rimbaud envía algunos de sus poemas a Le Parnasse contemporaine, la revista de los jóvenes poetas franceses, pero no se los publican.

    Ese mismo año, coincidiendo con el inicio de la guerra franco-prusiana, Rimbaud se escapa por primera vez, trasladándose a París. Allí es detenido y devuelto a casa, donde apenas pasa unas semanas antes de huir de nuevo, esta vez a Charleroi, donde intenta, también sin éxito, trabajar de periodista y publicar su primera colección de poemas. Todavía volverá a intentar establecerse en París a principios de 1871 pero no lo logrará definitivamente hasta septiembre, después de que el propio Verlaine le invite a unirse a su círculo de poetas simbolistas. Rimbaud, que con solo 16 año ya había escrito algunos de sus principales poemas como Le Bateau ivre, se aloja ocasionalmente en casa de Verlaine, con quien inicia una relación amorosa pese a que está casado, pero pronto su comportamiento salvaje e impredecible - borracho, hiere con un estoque al fotógrafo Carjat-, obliga a Verlaine a alejarlo de París.

    Rimbaud regresa durante unos meses a Charleville pero en junio de 1872 se halla de vuelta en la capital y esta vez es el propio Verlaine quien decide marcharse con él a Inglaterra. Tras varios meses de vagabundeo, Verlaine, que había decidido regresar junto a su mujer, se traslada solo a Bruselas. Rimbaud va tras él para evitarlo pero finalmente, Verlaine, borracho, le dispara hiriéndole levemente. Como consecuencia de todo esto, Verlaine es encarcelado y Rimbaud se aísla en una finca de su familia para escribir Una estación en el infierno, que se publicará ese mismo año. Al siguiente, Rimbaud todavía viaja a Londes con otro poeta, pero poco después regresa a  Charleville dispuesto a rehacer su vida al margen de la literatura.

    Entre 1875 y 1878 Rimbaud viaja por Alemania, Italia, Austria, Escandinavia, Egipto y Chipre. Trabaja, al parecer, en la troupe de un circo e incluso se enrola para servir como soldado en la isla de Java, pero en todos los casos su viaje concluye con el regreso al hogar, donde ha de pasar unos meses recuperándose antes de partir de nuevo. Muy diferente es el periplo que inicia en 1880, que le lleva primero hasta Adén, en Yemen, para dedicarse al negocio del café, y finalmente a Harar, una ciudad de la Etiopía somalí, donde se dedicará durante más de una década al comercio con los indígenas. Allí Rimbaud llevará, si bien con poco éxito, la típica vida de los mercaderes europeos en busca de fortuna. Asimila las costumbres y la vida de los indígenas, musulmanes en su mayoría, toma como concubina a una mujer del país, se hace con los servicios de varios esclavos negros e intenta diferentes empresas en los márgenes de la ley, como el tráfico de armas, con el único objetivo de enriquecerse cuanto antes para regresar a Francia. Sin embargo, los negocios de Rimbaud no resultan tan lucrativos como esperaba y, en cambio, su salud se resiente cada vez más, hasta el punto de que en 1891 los médicos le aconsejan que se traslade a Europa para intentar curar los fuertes dolores de su pierna derecha. Sin embargo, durante su viaje de regreso, su estado empeora y cuando llega a Marsella, no pueden hacer otra cosa que amputársela. Todavía regresa, una vez más, a recuperarse junto a su familia pero, pensando aún volver a Harar, viaja a Marsella, donde su estado se agrava y muere recién cumplidos los 37 años.

    Mientras, al margen de esta lamentable aventura colonial, en París Verlaine había comenzado a divulgar los poemas de Rimbaud, al que incluye en la recopilación Los poetas malditos de 1884. En 1886 Iluminaciones había aparecido en una revista simbolista y a partir de 1890, Rimbaud, sin volver a escribir ni un solo verso en más de quince años, se había convertido ya en uno de los padres de la lírica moderna.

PRINCIPALES OBRAS

    Une saison en enfer, 1873.

    Illuminations, 1888.

    Poésies complètes, 1895.